Un grupo de representantes de COAGRET y la Coordinadora Biscarrués-Mallos de Riglos han pedido este jueves al secretario de Estado de Medio Ambiente, Federico Ramos, que tenga"valentía política" para descartar la construcción del pantano de Biscarrués (Huesca).
Se han reunido con Ramos el presidente de la Coordinadora Biscarrués, Jesús Estachod, la portavoz, Lola Giménez, la alcaldesa de Murillo de Gállego, Marta de Santos, y el empresario de turismo activo Gustavo Ortas. Por parte del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente ha asistido, además de Federico Ramos, la directora general del Agua, Liana Ardiles.
"Esta obra supone un nuevo derroche de dinero público en un proyecto inviable técnicamente y judicializado", han asegurado los representantes ecologistas.Los representantes de las entidades ecologistas han transmitido a Ramos y Ardiles que es "una irresponsabilidad política" llevar adelante la redacción de este proyecto, "que cuenta con varios informes en contra de la propia Administración", en alusión al Instituto Geológico y Minero de España (IGME) y el Centro de Estudios y Experimentación de Obras Públicas (CEDEX). Además "va en contra de la Directiva Marco del Agua y las de Aves y Hábitats, que el Ministerio está para hacer cumplir".
Han pedido que no se pongan los intereses de Monegros "por encima de nuestra zona, de forma que si con la balsa tienen ya el agua que necesitan, no es democrático arruinar otra zona para beneficiarse ellos", añadiendo que "el agua puede generar riqueza suelta en la Galliguera y embalsada en Monegros".
Los representantes de COAGRET y la Coordinadora han insistido en separar el proyecto de Biscarrués respecto del de las balsas de Almudévar al ser posible técnicamente y han llamado la atención sobre las afecciones medioambientales de las balsas sobre los caudales del río Gállego.
Los activistas ha mostrado a Ramos y Ardiles un mapa que muestra todos los usos recreativos del río,señalando que "cualquier muro que se levante supone una afección sobre las aguas bravas, de forma que las empresas tendrán que dejar de trabajar en la totalidad del río provocando la pérdida de más de 100 puestos de trabajo directo y 300 indirectos".
"Hemos coincidido en que la zona de la Galliguera es, según los informes de la Confederación Hidrográfica del Ebro, la de mejor estado ecológico del río Gállego y eso se debe a la defensa de sus habitantes y al desarrollo sostenible potenciado por ellos", han señalado desde las entidades ecologistas.
Han afirmado que el 'Reino de los Mallos' es "un referente turístico a nivel nacional", agregando que los Mallos han sido declarados monumento natural y el castillo de Loarre podría ser reconocido como patrimonio de la Humanidad.
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