domingo, 15 de enero de 2012

Excursión y clausura del proyecto "Descubre el Rio Gállego"

Este fin de semana un grupo de voluntarios de la asociación Fondo Natural hemos realizado una excursión para conocer el tramo medio del Rio Gallego y celebrar la clausura del proyecto que hemos desarrollado durante todo el año 2011 gracias al programa de voluntariado de Voluntariado en Rios financiado por el Ministerio de Medio Ambiente y la Confederación Hidrográfica del Ebro.

La mañana amaneció  fresca y nebulosa, aunque al llegar a la localidad de Riglos pudimos disfrutar de breves instantes de Sol y hacer algunas fotos curiosas, con los Mallos coronados por nubes que no dejaban ver la cima.  Tras desayunar en el Refugio de Riglos nos acercamos al Centro de Interpretación de Aves Rapaces ARCAZ, donde las guias nos atendieron estupendamente.


Posteriormente nos dirigimos en el autobus hasta el puente de Santa Eulalia de Gállego, donde nos esperaba Jose Antonio, guía naturalista y miembro de la Coordinadora de Biscarrués - Rio Gállego, para acompañarnos por un recorrido de 3,5km junto al rio hasta la localidad de Erés.  A pesar del frio el paseo resultó muy ameno, descubriendo numerosas huellas y rastros de zorros, tejones, ardillas, jabalíes... una interesante vegetación tanto de ribera como mediterránea, con madroños, pinos, encinas, romero...

El rio en este tramo posee todavía un considerable caudal, ya que no ha sufrido extracciones para el riego, y la transparencia y calidad de sus aguas es más que evidente por la presencia de numerosos invertebrados.


Despues de calentarnos y comer en el Bar Casino de Biscarrués, partimos hacia la Alberca de Alboré, al norte del Embalse de la Sotonera, para dar la bienvenida a las primeras grullas que por estas fechas comienzan a llegar desde Gallocanta, en su ruta hacia el Norte de Europa.

Llegamos a la localidad de Montmesa justo antes de la puesta del Sol, momento en el que empezaron a divisarse en el horizonte las caracteristicas formaciones en linea y en "uve" de varios cientos de grullas.  Una tras otra fueron llegando a la cola del embalse, pasando sobre nuestras cabezas y deleitándonos con un increible espectáculo visual y sonoro.

Al cabo de media hora nos retiramos del observatorio y acudimos al Centro de interpretación de la Alberca de Alboré, en Montmesa, donde dos entusiastas guías locales nos explicaron las maravillas del lugar y nos obsequiaron con diversas publicaciones informativas. 


Para finalizar celebramos la despedida en el bar-casino de Montmesa, degustando unas deliciosas trenzas artesanas de la pastelería Antiga.

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